Aceites esenciales, o algo que huela bien

Qué es exactamente un aceite esencial? Así que algo huele bien aquí…

Los aceites esenciales no son más que una sustancia líquida obtenida por destilación al vapor o por presión en frío de un componente vegetal seleccionado. Se extraen de las hojas, flores, tallos y frutos de las plantas. Gracias a ello, se obtiene la esencia pura y concentrada de un ingrediente, que conserva el máximo cuidado y propiedades aromaterapéuticas. En el mercado, es habitual encontrar aceites con aditivos químicos, potenciadores de fragancia, no necesariamente buenos para nosotros. Por eso, a la hora de elegir los aceites esenciales, conviene buscar los orgánicos. Esto garantiza la pureza y la alta calidad de la materia prima de la que se obtiene el aceite.

Quién debería estar interesado en los aceites esenciales?

Los aceites esenciales son definitivamente para todos los que quieren enriquecer su cuidado de la piel con sustancias naturales adicionales, que tienen un efecto beneficioso sobre la condición de nuestra piel, cuerpo y espíritu. Son seguros, pero deben ser bien elegidos para adaptarse a sus necesidades. Cabe destacar que algunos son conocidos por sus propiedades estimulantes y energizantes, mientras que otros calman, tranquilizan y alivian los estados de agitación. Los aceites también se utilizan habitualmente para aliviar las afecciones de las vías respiratorias superiores. Por ello, merece la pena tener en el botiquín de casa, por ejemplo, aceite de eucalipto, que alivia los resfriados y la rinitis. Los aceites se suelen utilizar en forma diluida, porque están muy concentrados. Las excepciones son los aceites con propiedades antibacterianas que pueden aplicarse de forma puntual sobre las lesiones inflamadas, como el aceite de árbol de té.

Se puede obtener aún más de la naturaleza?

Sí! Deberíamos incluso. Merece la pena optar por los aceites ecológicos. Se elaboran con los mejores ingredientes procedentes de cultivos controlados que no utilizan productos fitosanitarios sintéticos. Cuando se crean aceites esenciales, sólo se deben utilizar ingredientes de proveedores de confianza certificados según la norma COSMOS BIO. La naturaleza orgánica de los aceites es muy importante. ¿Por qué? Porque los aceites esenciales también se utilizan para ayudar a tratar las afecciones del tracto respiratorio superior, como cuando se inhalan. Es muy importante que nuestro cuerpo inhale sustancias inocuas. Al elegir aceites esenciales certificados, puede estar seguro de que está proporcionando a su cuerpo sólo ingredientes naturales.

Aceites esenciales para el cuerpo y el alma

A menudo nos encontramos con el uso multinivel de los aceites. Su consistencia líquida permite utilizarlos en prácticamente todos los aspectos del cuidado de nuestra piel. Puede añadir fácilmente su aceite favorito a la crema, al suero o a las mascarillas para enriquecer las propiedades de cuidado del producto y darle un hermoso aroma. A la hora de tomar un baño, podemos añadir unas 5 – 10 gotas de aceite esencial a una bañera de agua caliente. Masajear la piel durante el baño y no aclarar el cuerpo después. El baño de aromaterapia no debe durar más de 30 minutos. Relaja perfectamente nuestro cuerpo, pero también… el espíritu. El impacto de los aromas en nuestra mente y su funcionamiento es muy importante, estimulante. Los aromas percibidos como agradables ayudan a relajarse, a regenerar las fuerzas, a calmar los sentidos. A diario, podemos reforzar nuestro bienestar mental añadiendo una mezcla de agua con unas gotas de aceite al difusor de aire o a la chimenea. También es una gran idea añadir unas gotas al aceite utilizado durante un masaje para hacerlo más sensual.

Cómo utilizar los aceites esenciales?

No hay restricciones especiales en este aspecto, sino sólo algunas buenas prácticas que vale la pena recordar. Ya sabemos que son muy versátiles y encontrarán aplicación tanto en el cuidado especializado como en la potenciación del aroma de nuestros cosméticos. Pero siempre hay que tener en cuenta que son sustancias muy condensadas y que deben utilizarse diluidas en agua u otro aceite base, como complemento de los cosméticos. Por lo tanto, no debemos frotar el cuerpo con el aceite, sino añadir, por ejemplo, unas gotas a nuestra loción corporal favorita. A la hora de enriquecer un baño agradable y aromático con ellos, lo mejor es verterlos con el flujo de agua para que toda la habitación se llene inmediatamente de un aroma sensual. Recomendamos realizar una prueba de alergia antes de utilizar una nueva fragancia de aceite, ya que se trata de sustancias completamente naturales y en ocasiones pueden provocar una reacción alérgica. Le animamos a crear sus propias composiciones de fragancias, basadas en aceites esenciales ecológicos. Las fragancias dulces y florales van bien con las fragancias cítricas, por ejemplo, el aceite de geranio con la hierba de limón o el aceite de pomelo blanco. Las fragancias energizantes, por otro lado, se llevan bien con las notas amaderadas y alcanforadas, por ejemplo, el aceite esencial de menta y eucalipto – darán una mezcla de un aroma fresco y amaderado con una nota energizante. Para las fragancias más pesadas y orientales, como el pachulí, es ideal utilizar naranja dulce, que en dúo creará un aroma dulce, cítrico y exótico con una nota amaderada. Te animamos a que hagas pruebas y compongas tus propias mezclas. Tal vez encuentre en usted, por cierto, el olfato de un verdadero perfumista.